Desde hace más de diez años, trabajo como modelo artística en busca de fotógrafos y pintores. Fundamental para mi carrera y formación fue mi encuentro humano y artístico con Ettore Comi, fotógrafo y director que, allá por 2003, fue el primero en enseñarme a posar con humildad y gracia. Luego la artista visual y en aquel momento también profesora de arte Beatrice Pasquali, con la que colaboré como modelo entre Verona y Valpolicella en un caluroso verano de 2015. Y de nuevo los fotógrafos Irene Pepe, Alessandro Favaloro, Fabri Ca que captaron a Antígona con verdad y delicadeza.

Estudio Nino Crociani

«El encuentro con Nino Crociani, pintor y grabador, fue uno de los más significativos de mi vida. Fui su modelo en los últimos años de su vida. Los posados con él, que dieron lugar a una serie de dibujos y grabados, fueron siempre una oportunidad para mantener abierto un diálogo sobre la realidad artística y social del presente y del pasado. Estaba tenso en la búsqueda continua de un signo cada vez más preciso y, como suele ocurrir cuando poso, captó muchas de mis almas, más de las que podía darse cuenta».

Colaboración activa de 2014 a 2016 – Intervención artística en el Studio Museo Francesco Messina con motivo de la exposición Carta e Ferro, Milán 2016.

El Observatorio Figural

«Cada vez durante las poses sucede algo milagroso: la mesa de madera tosca, la cercanía de los dibujantes, los espejos, las luces. Aquí he aprendido la presencia, entrando cada vez en un flujo performativo que es casi una meditación, cayendo en el silencio de uno mismo para convertirme en el instrumento de otra comunicación, luego devuelta en los dibujos de los participantes».

Desde el verano de 2014 colaboro permanentemente con L’Osservatorio Figurale, un centro internacional para el estudio de la figura a partir del natural fundado por Enrico Lui y dirigido ahora por Anna Lui. Un lugar histórico de memoria y constante acontecer en el que el legado artístico de Enrico es hoy luz y guía incluso para quienes no le conocieron.

Liana Ghukasyan

«Trabajar con Liana Ghukasyan, pintora armenia, me brindó la oportunidad de dar a las poses una dimensión más teatral y escénica mediante la hábil propuesta de claves temáticas tomadas del panorama literario, fotográfico y musical. Dando vida a una relación entre diseñadores y modelo cada vez original e iridiscente».

Colaboración activa de 2017 a 2019 en el curso de dibujo Il profumo del nudo y en talleres experimentales en colaboración con la fotógrafa Giulia Bersani.